Esta semana «A» nos mandó esta pregunta: Después del arrebatamiento, ¿La salvación será solo para el pueblo judío, o también para los gentiles? Para entender de una manera más clara el asunto de la salvación después del arrebatamiento, es conveniente conocer la cronología de ciertos hechos.
Como sabemos Dios tomó un pueblo de entre las naciones para que fuera su pueblo; nos referimos al pueblo judío. Éxodo 19:3-9
De tal forma que Dios tenía una relación con el pueblo judío, su pueblo. Sin embargo, su pueblo lo desechó. Lo rechazó y eso provocó que Dios se volteara a todas las naciones:
«A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron. Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios;» – Juan 1:11-12
Desde entonces, el pueblo de Dios está formado por todos aquellos que creen y reciben a Jesucristo como su salvador y que son sellados con el Espíritu Santo. Efesios 1:13, que es la garantía de la promesa de la esperanza de que Dios vendrá por los suyos para que estén con Él, y eso justamente ocurrirá en el momento del rapto, como también se conoce al arrebatamiento tal y como se encuentra narrado en 1 Tesalonicenses 4:13-18. En donde se describe la forma en que el Señor Jesucristo vendrá por todos los creyentes, vivos y muertos.
Ahora bien, ¿eso significa que Dios desechó al pueblo judío? La respuesta como decía Pablo a esa misma pregunta que se hace en Romanos 11:1. La respuesta es contundente ‘me génoito’ (μὴ γένοιτο), «de ninguna manera».
Dios viene por su pueblo formado por los creyentes de todas las naciones. Es como si Dios hubiera estado comunicándose con el pueblo judío por celular, válgase la ilustración, y de repente ante el rechazo de su pueblo, Dios lo deja en la espera porque entra otra llamada para atender a los que se han convertido durante todas las épocas, creyendo en el sacrificio de Jesucristo durante esta segunda llamada que constituye el periodo de la gracia, pues la llamada con los judíos sería el periodo de la Ley.
Pues bien, el arrebatamiento, pone fin a esta segunda llamada, la de la gracia con los creyentes (gentiles en su gran mayoría y algunos judíos que se pudieron haber convertido).
¿Por qué? Porque cuando ocurra el rapto, Dios se llevará consigo a todos los que creyeron en Jesucristo bien sea que durmieron (murieron) o que estén vivos. Vea otra vez 1 Tesalonicenses 4:13-18
De tal manera que en el mundo después del rapto únicamente quedará el pueblo judío con todos los que no creyeron en Jesucristo. Es decir, Dios vendrá por su Iglesia Universal formada por todos los verdaderos creyentes que tengan la garantía, es decir el Espíritu Santo. Ya no habrá más Iglesia, así se desprende del hecho de que en los primeros tres Capítulos del Apocalipsis se repite recurrentemente la palabra iglesia, y a partir del Capítulo 4 ya no se menciona más. Y justo en ese momento empiezan los siete años de tribulación.
Estos siete años que se dividen en dos períodos de 3 años y medio y que Daniel identifica como una semana (siete días), Daniel 9:27 o 1290 días en Daniel 12:11, y en Apocalipsis se identifica la segunda mitad de los siete años como un tiempo (1 año), y tiempos (2 años), y la mitad de un tiempo (medio año), total 3 años y medio; para referirse a la segunda mitad de los 7 años de tribulación. Apocalipsis 12:14
Esto es en la primera parte de la tribulación (3 años y medio), después de el rapto, vendría el anticristo y hará pacto con Israel y les dará el Lugar Santo (donde estaba el Templo que será reconstruido, y que hoy esta la Cúpula de la Roca o Mezquita de Omar, en posesión de los árabes). Y reanudarán el continuo sacrificio para Dios como lo hacía en antaño el pueblo judío. Y el anticristo perseguirá a los gentiles que crean en ese período, pero su conversión será bajo un ambiente de persecución, que pondrá en juego su vida y no como en este tiempo en que recibimos el Evangelio en un ambiente de paz. Apocalipsis 6:9-10; 20:4
Al término de los primeros 3 años y medio de la tribulación, el anticristo, llevará a cabo lo que se conoce como «la abominación desoladora» (sacrificio impuro en el templo), y se volverá contra el pueblo judío, en lo que se conoce como los segundos 3 años y medio de la gran tribulación. Daniel 9:27
Entonces vendrá una gran persecución en contra de los judíos y justo en ese momento habrá un gran avivamiento entre el pueblo judío y se actualizará lo que dicen las Escrituras
«Porque no quiero, hermanos, que ignoréis este misterio, para que no seáis arrogantes en cuanto a vosotros mismos: que ha acontecido a Israel endurecimiento en parte, hasta que haya entrado la plenitud de los gentiles; y luego todo Israel será salvo, como está escrito: Vendrá de Sion el Libertador, Que apartará de Jacob la impiedad.» – Romanos 11:25-26
De tal forma que después del rapto habrá salvación para gentiles y para judíos, porque como dice:
«Porque Dios sujetó a todos en desobediencia, para tener misericordia de todos.» – Romanos 11:32.
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